El titular de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte, Dr. Ariel Franetovich, comunica que no alcanzarán los esfuerzos que se están realizando desde el organismo si todas y cada una de las provincias, a través de sus respectivas secretarias de transporte, no redoblan sus esfuerzos en la fiscalización y control en los servicios de transporte de pasajeros.
Desde la CNRT hemos incrementado en un 200 por ciento las fiscalizaciones, y especialmente, las retenciones de micros, tanto por falta de descanso de choferes como por irregularidades en las condiciones técnicas de los vehículos.
Es un deber de cada uno de los actores del trasporte, como lo hicimos y lo estamos haciendo desde la CNRT.
Asimismo, es importante que cada provincia incorpore en la cadena de responsabilidad penal a los empresarios, que disponen como conductores a choferes sin las correspondientes horas de descanso, o micros en servicio, sin las condiciones legales correspondientes.
En ese sentido, desde la CNRT hemos notificado a cada apoderado de las empresas de trasporte automotor de pasajeros sobre las faltas más recurrentes que vienen cometiendo en materia de seguridad, y haciéndolos responsables penalmente por los daños que pudieran ocasionar, además de las responsabilidades administrativas y civiles que corresponde. Estas resoluciones pueden verse en nuestra página www.cnrt.gov.ar
Por ello, advertimos e instamos a las provincias a redoblar los esfuerzos, incrementar los operativos y evaluar la efectividad los mismos.
No estábamos equivocados cuando decidimos incrementar y endurecer los operativos, a pesar de los inconvenientes que se fueron y se irán presentando. Como el caso del conflicto con la UTA en Mar del Plata, en que por una involuntaria interpretación del momento respecto de nuestras intenciones, el día 4 de enero se generó un paro adjudicando un exceso de control por parte de la CNRT, cuando en realidad no era contra la fuente de trabajo, sino contra las faltas e infracciones relacionadas a la seguridad, especialmente la falta de descanso.
Creemos que estos "excesos" de control tienen que ser la constante, y deberían ser en forma permanente y habitual en cada jurisdicción provincial.